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Science and its times. Vol 3. 1450 to 1699 (Parte 14)

Si se da un vistazo general a la medicina del Renacimiento, se ve que el "foco" estaba más en las pajas mentales de los médicos que en el interés de los pacientes. Los médicos se ocupaban de discutir sobre la "filosofía" de la curación, dejando en manos de los barberos, los "empíricos" y los charlatanes, la atención directa a los pacientes (que no fueran ricos, claro).

Pero hubo cambios importantes. Y uno de ellos vino de la mano de Paracelso (versión "reducida" de Theophrastus Phillipus Aureolus Bombastus von hohenheim) que si no recuerdo mal hace referencia a un médico de la antigüedad (el tal Celso del nombre, con lo que Paracelso vendría a significar "casi" Celso). El caso es que este muchacho tuvo a bien re-definir la forma de considerar los procesos mediante los cuales ocurren las enfermedades, o sea, la patología.

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Así que, para él, las enfermedades eran entidades específicas que afectaban a partes concretas de los cuerpos y que deberían ser combatidas mediante preparados químicos específicos para esas enfermedades. Y esa es la novedad de la contribución de Paracelso, aunque parte de sus remedios no fuesen correctos. Porque se focalizaba en el paciente, no en la "filosofía" de la enfermedad.

Anteriormente, el principio básico de la medicina era el de los humores y de la cura por el contrario. Es decir,  la "filosofía" decía que la enfermedad era debida a un desequilibrio entre los humores, había que "potenciar" aquellos que estuviesen disminuidos y "debilitar" los que estuviesen aumentados. Esa "filosofía" se traducía en que los barberos hacían sangrías y purgas. Y que cada paciente recibía un "tratamiento" personalizado pues el desequilibrio entre los humores sería específico para cada persona. Estos, por cierto, no son los homeópatas, sino que en la época recibían la denominación de "empíricos" o curanderos.

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Pero ya en el siglo XVI este sistema fallaba más de la cuenta, sobre todo en la atención a enfermedades importantes, como las plagas y la peste. Por no hablar de las primeras epidemias de sífilis, que se creía provenía de la América recién descubierta por Colón. Algunas de esas sífilis, además, eran realmente viruela, pero sirvieron para mostrar que los métodos "tradicionales" no funcionaban y además, los médicos "serios" perdían el tiempo en discusiones sobre si esas enfermedades eran o no nuevas. El caso es que los enfermos morían como ratas porque el "tratamiento" personalizado no funcionaba. Y Paracelso hizo las "prácticas" de sus nuevas ideas precisamente con esas enfermedades, la peste y la sífilis.

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Pero a Paracelso también le iban otras "novedades". Por ejemplo, participaba de la filosofía neoplatónica introduciendo la influencia astrológica sobre la enfermedad y la salud, y el médico debería explorar las "conexiones" entre el ser humano y el Universo. como se ve, los charlatanes de hoy en día no han inventado nada.

Su auge tuvo su relación también de los movimientos religiosos de la época. El rechazo de Paracelso a la medicina ortodoxa tenía su casi simétrico en la lucha del Protestantismo contra la ortodoxia católica. Paracelso y Lutero como "revolucionarios".

Usó conceptos de la alquimia para aplicarlos a la comprensión de los procesos de la naturaleza. No en vano, no todos los alquimistas querían convertir el plomo en oro. Algunos querían encontrar el elixir de la vida eterna, y por el camino apareció algún medicamento químico. La "innovación" de Paracelso fue ver que la experiencia práctica de los alquimistas podía ser útil en la práctica médica. La alquimia podía acceder a los "poderes" ocultos de las sustancias que podrían ser la curación para las enfermedades. Aunque incorrecto el desarrollo, la idea básica era fundamentalmente cierta: la química de la materia sería la solución para la obtención del medicamento curativo.

Así que los cuatro humores fueron sustituidos por tres "principios" químicos": mercurio, sal y azufre.

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El objetivo era que las medicinas actuasen en la raíz de la enfermedad. Y las medicinas de Paracelso podían llegar a ser muy potentes! Y se basaban en el principio de la similitud entre la enfermedad y la sustancia que la curaría. Ya no era un desequilibrio, sino que había que buscar el remedio concreto para esa enfermedad, la tuviese quien la tuviese.

De la alquimia uso, por ejemplo, los destilados. Uno de ellos, llamado espiritus vitrioli, servía como sedante y lo usó en el tratamiento de pacientes epilépticos. Efectivamente, había encontrado las aplicaciones médicas del éter.

Otras de las novedades de Paracelso era que los médicos debían de dejar de basarse exclusivamente en la tradición de los libros y adquirir su conocimiento con la experiencia. El caso es que el concepto de "experiencia" para Paracelso era bastante más amplio de lo que es actualmente. Su "experimentación" también incluía intuiciones místicas poco o nada experimentales. Pero sirvió para que los médicos estudiasen el entorno de los pacientes y que se aceptasen prácticas "empíricas" que sí habían demostrado su eficacia.

Y por encima de todo, que era la experimentación y el estudio el que permitirían encontrar las curas a las enfermedades. Una tarea que podían hacer los seres humanos sin necesidad de "ayudas" externas. Y unas ideas de que era tarea de las personas lo que antes se dejaba a los dioses, que se aplicaron a otros ámbitos de la sociedad.

Esa es la gran contribución de Paracelso al progreso de la Humanidad.

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