El capítulo 10 se titula Tú rascas mi espalda, yo cabalgo sobre la tuya.
También es un capítulo con largas notas al pié que complementan el texto. Dado el título, el tema de este capítulo está en explicar los aparentes comportamientos altruistas, incluyendo el altruismo recíproco (o simbiosis), a partir del gen egoísta.
Evidentemente, la explicación básica es que si los organismos viven juntos, es porque sus genes obtienen más beneficios que al estar solos (y que los costes de vivir en grupo).
Por ejemplo, vivir en grupo es mejor que vivir solo, respecto a la posibilidad de ser comido por depredadores. Sería el modelo de W.D. Hamilton: El instinto egoísta de cada individuo hace que se arrime a otros para quedar menos visible ante un depredador. Sería una manada de individuos egoístas...
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(Aquí tenemos un clarísimo ejemplo de una manada de individuos egoístas que se juntan para no sólo sobrevivir, si no para hundir España, lo que les llevaría a la extinción, como veremos posteriormente con la denominada estrategia de los tramposos, también de clara aplicación a bastantes de los individuos que salen en esta foto. Disculpas por la referencia política, pero cuando leí lo de manada de individuos egoístas fue lo primero que me vino a la mente).
Siguiendo con el libro... Dawkins intenta explicar comportamientos aparentemente altruistas (como las llamadas de alarma de los pájaros o los saltos de las gacelas) desde la perspectiva egoísta:
- En el caso de los pájaros (P.R. Marler), no sería el sacrificio del que avisa para que otros se salven, sino que avisa para que todos escapen y él poder hacerlo en el medio.
- En el caso de los saltos de la gacela delante del depredador (N. Smythe y A. Zahavi), no son para sacrificarse, sino para indicar que es mejor ir a por otro ejemplar más débil.
También dedica varias páginas y notas ha hablar del comportamiento social de insectos gregarios (himenópteros y no) y de los ratones moteados sin pelo (cuya existencia se organiza de forma muy semejante al de esos insectos), y su división en grupos con tareas y funciones claramente definidas y que se pueden explicar a partir del gen egoísta. Son páginas muy interesantes pero difíciles de resumir.
Y qué pasa con la simbiosis o el altruismo recíproco, que se da incluso entre individuos de diferentes especies, aunque en algunos casos es tan íntima que apenas se distinguen (un líquen es la simbiosis casi perfecta entre un hongo y un alga)?
Se pueden considerar una simbiosis el hecho de que en una célula haya mitocondrias (originalmente unas bacterias)? Una simbiosis que se habría producido en los primeros momentos de la evolución celular.
Y, ya viniéndose arriba, no será el ADN también una simbiosis entre genes (egoístas)? Acaso los virus, básicamente moléculas nucleotídicas autorreplicantes, no podrían considerarse "genes rebeldes" que viajan de un cuerpo a otro?
Volviendo a cosas más mundanas, el altruismo aparente tiene una explicación sencilla cuando el beneficio mutuo es inmediato para ambos participantes (líquen). Pero qué pasa cuando hay diferencia temporal entre el beneficio que espera cada integrante? Existe el riesgo de que existan aprovechados del altruismo (egoísta) ajeno sin devolver el favor, aunque sea más tarde?
Para resolverlo se puede aplicar el modelo de la EEE (Estrategia Evolutivamente Estable) a una situación en la que podrían existir, en el lenguaje de Dawkins, Incautos (siempre son altruistas con cualquier otro individuo, esperando recibir un mismo trato posteriormente) y Tramposos (nunca se comportan de forma aparentemente altruista, egoísmo puro y duro).
En buena lógica, parecerá que los Tramposos siempre llevan las de ganar. Los Incautos sólo lo llevan bien si todos lo fueran, pero siempre puede aparecer un Tramposo (p. ej. por una mutación genética). Y una vez que aparezca el primero, es cuestión de tiempo que vaya ganando proporción hasta...la extinción de los Incautos y, después, de los Tramposos.
Eso está bien en un grupo en el que no hay memoria del comportamiento ajeno. Pero qué pasa si hay Rencorosos (los que actúan altruistamente pero recuerdan quiénes no devolvieron el favor)? Si sólo hubiera Rencorosos e Incautos, no habría diferencia. Si casi todos fueran Tramposos y hubiera uno o muy pocos Rencorosos, éstos se extinguirían. Cuando aumentase su población, llegaría un momento en que compensaría ser altruista con los escasos Tramposos.
Si se hacen las correspondientes simulaciones, resulta que la estrategia de los Rencorosos es una EEE mejor que la de los Incautos y la de los Tramposos. En una población de Rencorosos, tanto los Incautos como los Tramposos serían siempre minoritarios.
El resultado sorprendente es que la estrategia de los Tramposos también es una EEE, pero que conduce a la extinción.
(Ahora se entiende porqué se les llama Incautos? Porque siempre pierden. Igual que nosotros si los de la foto ganan, no?).
Un ejemplo de simbiosis que explica con detalle es la de los peces que limpian a otros peces más grandes (y que realmente son sus depredadores). Para evitar que se los coman han desarrollado un aspecto y unos bailes que les anuncian como el servicio de limpieza.
Y en los seres humanos? Pues dado que tenemos la capacidad de reconocimiento (algo así como la estrategia del Rencoroso), se supone que la evolución ha favorecido el altruismo recíproco (pero que es realmente la consecuencia de los genes egoístas). Esa sería el origen evolutivo de nuestro comportamiento humano: Envidia, sentimiento de culpa, gratitud, empatía... estrategias para engañar y las correspondientes contra-estrategias para detectar el engaño...
Pero como dice Dawkins "El tema (refiriéndose al altruismo recíproco entre seres humanos) es tentador, pero no soy mejor para tales especulaciones que cualquier otro hombre y dejo al lector que se entretenga en ello".
Resistirá la tentación de no hacerlo en capítulos posteriores?
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